fbpx

¿Sabes que tu cuerpo tiene memoria?

Todo lo que has vivido queda grabado en él...

El cuerpo tiene memoria

Todo lo que vivimos se hace a través del cuerpo. La vida se produce gracias él.  Nuestras células  reciben y reaccionan ante nuestras vivencias y se adaptan a ellas. Lo que sentimos queda almacenado en nuestra mente. Pero también queda grabado en forma de sensaciones físicas, en lo que llamamos «la memoria del cuerpo».

Esta memorial corporal se esconde por ejemplo, detrás de nuestros patrones tensionales. O en nuestra postura física. También tiene que ver con la forma en la que nos movemos. Con el modo en el que tocamos o no tocamos a los demás. O con el hecho de que disfrutemos de un abrazo o lo rechacemos.

Ciertos dolores físicos también han sido memorizados por el cuerpo y pueden estar detrás de padecimientos a los que no se les encuentra explicación médica.

El cuerpo no miente. En palabras de la psicóloga Luz Casanovas, autora de La memoria corporal, «el cuerpo se moldea a partir de una carga genética, con las experiencias, sentimientos, emociones, recuerdos y pensamientos. Guarda sus secretos hasta que queremos descifrarlos y no se cansa de darnos pistas en forma de síntomas, que es su forma de hablar«.

Decidí dedicarme unos minutos de atención, para que mi cuerpo me diera pistas respecto a lo que me estaba pasando y lo que necesitaba, para sentirme mejor.

¿Qué es lo que se guarda en la memoria de nuestro cuerpo?

Todos hemos vivido situaciones difíciles en la vida.  Experiencias que fueron intensas, dolorosas o que no supimos manejar correctamente por carecer de recursos para ello. Algunos incluso hemos pasado por situaciones traumáticas. Según wikipedia un evento traumático se produce cuando hay: exposición personal directa a un suceso que envuelve amenaza real o potencial de muerte, grave daño u otras amenazas a la integridad física personal. Ser testigo de un suceso que envuelve muerte, daño o amenaza a la integridad física de otra persona. Enterarse de la muerte no esperada o violenta. Daño serio, amenaza de una muerte o daño experimentado por un miembro de la familia u otra relación cercana. 

Si vivimos experiencias traumáticas, es probable que nuestro cerebro haya procesado lo vivido de una manera distinta a su forma habitual de funcionar.  Si lo normal es que nuestro cerebro recuerde los hechos con un mínimo de detalles y con un contenido emocional normal. No ocurre así ante experiencias traumáticas.

El trauma y la memoria del cuerpo

Los recuerdos que tenemos sobre eventos traumáticos son diferentes. Tal vez aparezcan de manera fragmentada, sin un orden aparente. Como si fueran diapositivas caóticas. O quizás no haya recuerdo ninguno. Puede que hayamos borrado la experiencia completamente de nuestra memoria. Otras veces por el contrario sucede que los recuerdos aparecen una y otra vez, con la misma intensidad perturbadora que se vivió en la experiencia original. En forma de flash backs. Cuando la mente deja de procesar correctamente, lo vivido se graba en nuestro cuerpo tal cual ocurrió. Y todo queda impreso en la memoria del cuerpo. Muchas personas experimentan sus recuerdos de una manera inconsciente sólo a través de su cuerpo, por ejemplo sintiendo una activación emocional muy alta ante algo determinado, sin que sepan por qué se sienten así de mal. Otras personas tienen claro qué les sucedió, pero no pueden de sentirse bien en su día a día. Viven con síntomas de ansiedad o depresión y con una sensación extraña, como si hubiera algo dentro de ellos que estuviera mal. Todos esos síntomas, todas esas sensaciones físicas vividas con sufrimiento, son el resultado de la expresión corporal de nuestros recuerdos. Es nuestra memoria corporal pidiendo ser atendida. Porque aunque hayamos olvidado y no forme parte de nuestro consciente, hay ciertas vivencias que tuvimos que necesitan ser exploradas y atendidas para poder sanarnos, y es nuestro cuerpo quien nos da pistas a través de los síntomas físicos, para que indaguemos en ellos.

Puedes compartirlo si crees que puede ser interesante para alguien:

Si quieres saber más, no te pierdas estos posts sobre conciencia corporal:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.